Título original: Ice Age: Continental Drift (2012)
Dirección: Steve Martino y Mike Thurmeier
Escrita por: Michael Berg y Jason Fuchs
País: Estados Unidos
SINOPSIS: Han pasado varios años desde la tercera parte. El mamut Manny intenta criar a su hija Morita, ahora una adolescente enamoradiza. Sin embargo, la formación de los continentes empieza a separar las tierras. Manny, Sid y Diego quedan separados del resto de su familia y amigos. En su viaje por reunirse con ellos, se enfrentarán a un grupo de animales piratas y a otros peligros del mar.
Esto es lo que pasa cuando uno estira el chicle de una franquicia sin ninguna originalidad ni creatividad.
No sé si ustedes lo recuerden, pero en la primera película de La Era de Hielo aprendimos que Manny había perdido a su familia en manos de cazadores humanos. El resto de la trilogía decidió ir dándole una nueva: en la segunda parte conoció a Ellie. En la tercera tuvo una hija. El desarrollo de personaje para Manny había terminado, así como el hilo unificador de la trilogía.
Ya los protagonistas no tienen más jugo argumental que exprimir. Y eso se nota en esta cuarta parte: a Diego le dan una novia, pero todo el romance es apresurado. A Sid lo reúnen con un miembro de su familia perdida, pero el guión lo ha vuelto mucho más tonto y torpe de lo que alguna vez fue en las tres primeras cintas.
Scrat, la ardilla prehistórica, sigue en su búsqueda eterna por bellotas. Pero a estas alturas sus esfuerzos ya son más patéticos que cómicos. Además que sus escenas son algunas de las más exageradas y absurdas de la película. Eso no estaría mal sino fuera porque quedan muy fuera de lugar con las (ya de por débiles) reglas de realismo que habían puesto las tres cintas anteriores. En especial el estúpido final del filme.
Sé que puede sonar injusto estar comparando esta cinta con las otras tres, pero no veo por qué separarlas. Las cuatro cuentan una sola saga.
Mas allá del desgaste del trío protagonista, La Era de Hielo 4 tiene dos problemas importantes.
Primero: tiene una enorme cantidad de personajes (los tres protagonistas, Ellie y Morita, las dos irritantes zarigüeyas, una pariente de Sid, un grupo de mamuts adolescentes, un topo amigo de Morita y todos los villanos piratas) y la película se la pasa saltando entre todos. Con tantos, no hay tiempo de enfocarse lo suficiente en uno o varios. Y tal cantidad hace que todo se sienta apresurado, en especial el "romance" entre Diego y la tigresa dientes de sable.
El segundo problema es algo más subjetivo. Siento que la franquicia se ha infantilizado mucho esta vez. No hay momentos oscuros ni serios ni emocionales. Cada escena, casi cada diálogo se utiliza para chiste y comedia. Lo cual no es necesariamente malo, pero me parece que contrasta demasiado con el resto de la saga. Quiero decir, ¡los villanos hasta tienen un numerito musical! ¡Y ni siquiera es bueno!
Como alguien que disfrutó (hasta cierto punto) las tres anteriores, ésta me aburrió.
CONCLUSIÓN: Personajes conocidos que ya no son interesantes, personajes nuevos insípidos y una historia aburrida con muchos clichés representan la caída al abismo de la saga de La Era de Hielo.
CALIFICACIÓN:
5
